Vivimos en un país muy especial, con problemas que arraastramos hace varios siglos y que al parecer no tienen solución viable. Aqui todo el mundo hace lo que le da la gana.

Al final de la Tiradentes, en Cristo Rey, hay unos vertederos aereos, al pie de estos hay unas llaves de agua publicas, para que la gente se abastezca del preciado. ^Pero ahi mismo, hay no un improvisado lavadero de carros, sino uno ya establecido. Este lavadero es tan oficial que los vehiculos de la Policia que patrullan el area son lavados ahi mismo. Esos padres de familia que lavan los carros ahi, no tienen sentido del ahorro y mantienen las llaves abiertas durante todo el tiempo, aunque no esten lavando. Se me ocurrió llamar a la CAASD para denunciar este hecho y la muchacha que me atendió no me abofeteó porque era por telefono. Por igual cuando uno llama porque ha detectado una fuga de proporciones gigantescas, el mismo trato. Estos lavadores podrian continuar su negocio si en vez de usar la llave, usaran un cubo. Me he hecho eco de estos problemas en una columna, natimuerta, pues ningun periodico ha querido publicarla: "En tu calle estoy..."

La prensa publicó hace unos dias el dato de que los dominicanos consumimos el doble de agua que la media mundial, unos 500 galones de agua, eso es una barbaridad. Aqui la gente actua como si tuvieran un rio en el patio de sus casas. Las campañas de ahorro no han dado resultado, como una muy bonita que utilizaba como slogan "el agua es vida, no la desperdicie..".